Pasar al contenido principal

El reto de ser padres, ¿cómo afrontarlo?

  Ser padre de familia es un reto para el que muchas veces uno no se encuentra preparado. El aprendizaje acumulado con el paso de los años puede mejorar los conocimientos en historia, en matemáticas y un sinnúmero de materias. Sin embargo, ¿cómo aprender sobre la vida?, ¿cómo aprender sobre el amor?, ¿sobre la generosidad?
 
La respuesta yace en la familia, escuela de virtudes, escuela de amor. No obstante, los padres, que son los encargados de formar a los niños del presente, a los adolescentes del mañana y los adultos del futuro, se enfrentan a una aventura épica en la que no saben cómo enfrentar las batallas del día a día, de la cotidianidad; no saben cómo reaccionar ante ciertas circunstancias, cómo enseñar a amar, cómo inspirar a vivir.

Sí, tú que eres padre, que eres madre, a diario te cuestionas, si las decisiones que has tomado han sido las adecuadas, si las pláticas han sido escuchadas, si el lazo, que en un principio parecía inquebrantable se ha fortalecido con el paso de los años, o, por el contrario, ha sido erosionado por la falta de comunicación, de comprensión y de apoyo entre padres e hijos, entre hermanos y hermanas.

Ser padre, ser madre ciertamente es una tarea ardua que implica una entrega completa, desinteresada y generosa, y aunque para desempeñarla no hay reglas ni recetas, existen cursos, ideas y libros que impulsan a todo padre comprometido a ofrecer lo mejor de sí.

En un ánimo por contribuir a la sociedad, particularmente a la familia, nuestro estimado colaborador, Raúl Espinoza Aguilera, presentó recientemente el libro “Cómo fomentar el amor en la familia”, el cual surgió de su particular interés por volver a las raíces de nuestra cultura, del mismo ser humano y de su inquietud por reforzar sus cimientos.

Este libro, ameno, interesante y útil, en cada una de sus páginas presenta propuestas prácticas y asequibles para que padres e hijos se acerquen, se comuniquen y mejoren su relación. “Este libro se presta para tener buenas tertulias en casa, en familia”, aseguró Guillermo Rafael Cantú, doctor en Ciencias y Filosofía, durante la presentación.

José Luis González López, representante de Editorial Panorama, por su parte, lo definió como un esfuerzo en donde la superación del ser humano se hace patente gracias al legado familiar que el autor recibió de sus padres, en donde se profundiza en la importancia del buen ejemplo y de la atención personalizada.

Hoy en día, niños y adolescentes viven en un mundo paralelo, en una burbuja fuera del alcance de los progenitores, claro, sólo si éstos lo permiten. ¿La solución para erradicar este mal? Apostarle a la familia, apostarle a la educación y hacer de cada uno de los hijos, una fuente de virtudes, un semillero de dones.

De acuerdo con la doctora Ana Teresa López de Llergo, especialista en Ciencias de la Educación, “Cómo fomentar el amor en la familia”, contiene innumerables respuestas y ejemplos sobre cómo hacer de ella una escuela de virtudes, cómo hacer que autoridad de los padres no sea vilipendiada, y que el respeto a todos los miembros de la familia sea el pan de cada día.

Ser padre o madre es un reto. Nadie cuestiona dicha afirmación, sin embargo, por más compleja que sea, por más papeles que los padres deban asumir (ya sea de médicos, pedagogos, psicólogos, enfermeras, terapeutas, y más, muchas más), por más habilidades que requieran desarrollar, deben tener en mente que el reto no es ser impecables, perfectos, sino saber rectificar, añadió en su intervención.

Tras la conmovedora presentación, en donde Raúl Espinoza recibió el agradecimiento de una madre de familia, Maite Lot, por ser artífice de una obra tan provechosa para los padres, uno se percata de que éste es un libro que no es exclusivo para los progenitores, sino que trasciende a su público, porque habla de temas y verdades universales. En ese sentido, los hijos también pueden leerlo y seguramente extraerán valiosas lecciones.

Con este trabajo, el autor, partiendo de su experiencia propia, del legado espiritual de su familia, ofrece un homenaje a sus padres fallecidos, volviendo prácticas cada una de sus enseñanzas. Además, reconoció la inspiración de San Josémaría Escrivá de Balaguer y sus escritos sobre la familia jugaron un rol fundamental en el desarrollo de la obra.

“Cómo fomentar el amor en la familia” proporciona las herramientas para que los padres armen a sus hijos, niños y adolescentes, para enfrentar la tempestad de los tiempos actuales. Sin duda es un ejemplar que no puede faltar en la biblioteca familiar, pues, ¿qué mejor inversión hay, que apostarle a la familia?