En la carrera imparable de la experimentación con embriones, ha saltado la noticia no por esperada menos preocupante, de la clonación humana. Gran Bretaña próximamente autorizará la clonación humana con fines terapéuticos. La técnica será idéntica a la empleada en la clonación de la oveja Dolly.
Frente a los gravísimos problemas morales que se avizoran, la ley inglesa, fija la cláusula de su reproducción sólo por fines terapéuticos ..
Ahora bien, el ser humano no es sólo materia biológica. Toda persona es tal, por la composición del cuerpo y del alma; de la fusión entre la materia y el espíritu.
El clonar la oveja Dolly no presentó mayores problemas que los biológicos. Multiplicar ovejas clonadas, totalmente idénticas unas a otras, no constituyó gran problema. La clonación de personas no puede ser lo mismo que clonar ovejas. De aquí surge la perplejidad: ¿Podrá la ciencia clonar un alma –espiritual y distinta - para cada persona clonada, es decir, idéntica en su cuerpo?.Quizás estemos ya en los umbrales de la era de Frankenstein.