Gran parte de la humanidad somos unos inconscientes. Estamos asentados los terrícolas sobre una bomba de relojería que, en el plazo de unas décadas, según estudios serios científicos, cambiará -de no poner pronto y eficaz remedio- radicalmente el modo humano de vivir sobre el globo, arrastrando tras de sí a millones de víctimas humanas. Aparentemente-fuera de círculos minoritarios- no se nota reacción contundente ni en los gobiernos ni mucho menos en la población, ajena a todo lo que no sea lo cotidiano y lo
inmediato.
La dolorosa realidad es ésta: Entre todos nos estamos literalmente cargando nuestro planeta. Somos los hombres los culpables de las desgracias presentes y de las que se avecinan en el futuro.
Si algún medio divulga el tema, muchos lo tacharán de simple alarmismo. Hay quienes calculan egoístamente que dados los plazos previstos, a ellos no les tocará sufrir personal y directamente las consecuencias y prefieren no enterarse. Otros, ni sienten ni valoran el peligro que corremos todos por simple ignorancia o porque les acucian otros problemas más inmediatos. Si al menos las personas serias, intelectuales y de gobierno, personal y colectivamente, diesen la voz de alarma, algo podríamos hacer antes de que sea demasiado tarde. Mucho me temo que seguiremos igual de inconscientes hasta que.. Por favor, no dejen de ver el filme-reportaje "Una incómoda verdad" y luego fórmese cada uno su particular juicio y obre en consecuencia. Merece la pena por el bien de todos.