Celebración del
Adviento
Cuarto
Domingo de Adviento
Inicio
Guía: En el Nombre del Padre y
del Hijo y del Espíritu Santo.
Todos: Amén.
Guía: Ven Espíritu Santo,
Todos: llena los corazones de
tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.
Guía: Envía tu Espíritu
creador.
Todos: Y renovaras la faz de la
tierra.
Guía: Oh Dios, que has
iluminado los corazones de tus hijo con la luz del
Espíritu Santo, haznos dóciles a sus inspiraciones para
gustar siempre del bien y gozar de sus consuelo. Por
Cristo Nuestro Señor.
Todos Amén.
(Se enciende la cuarta vela)
Bienvenida
Guía: Una vez más nos
reunimos, atendiendo al anuncio de la llegada de Dios
nuestro Señor. Se acerca la gran fiesta de Navidad, la
fiesta del Nacimiento de nuestro Señor Jesucristo en
Belén y en cada uno de nuestros corazones. Preparémonos
a recibir a nuestro salvador reuniéndonos en torno a
esta corona.
Palabra de Dios
Guía: Escuchemos la palabra de
Dios:
Lector: Lectura del Santo
Evangelio según San Lucas:
Lc 1,39-45
En aquellos días levantándose
María, fue á la montaña con prisa, a una ciudad de
Judá; y entró en casa de Zacarías, y saludó á
Isabel. Y aconteció, que como oyó Isabel la salutación
de María, la criatura saltó en su vientre; y Isabel fue
llena del Espíritu Santo, y exclamó á gran voz, y
dijo. Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto
de tu vientre. ¿Y de dónde esto á mí, que la madre de
mi Señor venga á mí? Porque he aquí, como llegó la
voz de tu salutación á mis oídos, la criatura saltó
de alegría en mi vientre. Y bienaventurada la que
creyó, porque se cumplirán las cosas que le fueron
dichas de parte del Señor. Entonces María dijo:
engrandece mi alma al Señor; y mi espíritu se alegró
en Dios mi Salvador, porque ha mirado á la bajeza de su
criada; Porque he aquí, desde ahora me dirán
bienaventurada todas las generaciones.
Reflexión
Guía: Hoy en la víspera de
Navidad, una persona especial ocupa nuestra atención,
una mujer joven y hermosa llamada María, casi
desconocida para la mayoría de los judíos. Dios, sin
embargo la eligió para se la madre de su hijo
Jesucristo.
Diálogo
(Después de unos momentos de
silencio el guía debe motivar que los participantes
hagan comentarios sobre el texto bíblico. Para terminar
este diálogo se invita a los presentes a hacer un
compromiso.)
Compromiso
Guía: Pongámonos en presencia
de Dios y meditemos:
Al igual que nuestra Santísima
Madre la Virgen María, estamos dispuestos a tener como
único propósito en la vida hacer la voluntad del
Señor, y meditar en nuestro corazón el misterio del
nacimiento de Cristo. ¿He cumplido los compromisos que
me propuse? ¿Cómo hemos cumplido esos compromisos que
nos hemos propuesto anteriormente? ¿En qué he tenido
éxito, en qué he fallado? ¿Estoy dispuesto a cumplir y
ser fiel al igual que María lo fue en su vida?
(Se dejan unos momentos de
reflexión)
Despedida
Guía: Señor, gracias por
reunirnos una vez más en torno a esta corona. Haz que la
presencia de la Santísima Virgen María nos ayude a dar
ese último esfuerzo para estar listos y recibirte.
Permítenos acompañarla durante estos últimos días en
su camino a Belén para recibirte. Por Cristo Nuestro
Señor.
Todos Amén.
Guía: En el nombre del Padre y
del Hijo y del Espíritu Santo.
Todos: Amén.
(A continuación se puede
continuar la reunión con villancicos y juegos)