Aconseja un libro y nos habla desde una plaza
¿Insólito? Al menos creo que no es frecuente que el Papa aconseje un libro recién publicado, ni tampoco que recorra las calles de Roma -con su tráfico veloz, abundantes carros pequeños y motonetas que parecen volar sobre el pavimento- para dirigirnos la palabra en una de sus plazas.