Padre Fray Manuel Correa Díaz
Danos tu luz, Señor
Señor, sé nuestra Luz en cada día,
para poder ver por donde vamos,
y descubrir cual es la guía
que nos conduce al sendero de la vida.
Sé tú Señor, nuestro compañero de camino
de los que vamos por el mundo
para aprender que hacer en cada instante
y no perder el rumbo a medio día.
Si Tú nos acompañas,
feliz será la vida nuestra
y andaremos con paz y en alegría,
porque contigo, Señor,
la vida es esperanza y regocijo.
Dame tu paz, Señor
Dame tu paz oh Señor en este día
pues me siento desfallecer
quiero gritar y no sé qué decir
tan sólo pienso en Ti, Dios de mi vida.
Dame tu amor, pues es mi vida
presencia misteriosa que calcina
sin ti yo no sabría qué decir
contigo lo sé todo, sé vivir
Fuerza que penetras en mi vida
misterio recóndito eres Tú
bálsamo del alma en el dolor
consuelo de mi pobre corazón
Señor y Dios nuestro
Señor y Dios nuestro,
te doy gracias porque
eres un Padre bueno
con todos tus hijos,
y todas tus criaturas.
Yo te debo todo; la vida,
la salud, la familia,
la presencia de tu santo
Espíritu en mí;
por eso te estoy
eternamente agradecido,
porque cada instante
de mi vida,
es un don de tu amor.