Ayudas a la honestidad
Ayudas a la honestidad
Es hermoso encontrar a un hombre de principios rectos, a quien vive honestamente. Tiene una conciencia bien formada, sabe lo que tiene que hacer, asume sus deberes. Vive en línea recta, sin trampas, sin engaños, sin escapatorias.
Los hombres honestos, sin embargo, no son seres de otro planeta. Como cualquier otro, tienen sus momentos de debilidad, sufren tentaciones, sucumben. Si los honestos, si los mejores, fallan, es mucho más frecuente la caída entre quienes viven en la zona estadística de “los normales”...