La caridad es paciente
San Pablo presenta, como primer adjetivo para la caridad, la paciencia (cf. 1Cor 13,4). ¿Se trata de una casualidad? ¿Puso la palabra “paciente” en el inicio de la lista porque “sonaba bien”? ¿O no se tratará, más bien, de algo “dictado” por el Espíritu Santo, como un fruto de la experiencia de quien conoce a Cristo y, a través de Cristo, al Padre?