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Oraciones a Nuestra Señora del Pilar

Oraciones a Nuestra Señora del Pilar

Oh Virgen del Pilar, Reina y Madre, España y todas las naciones hispanas reconocen con gratitud tu protección constante y esperan seguir contando con ella.

Obténnos de tu Hijo fortaleza en la fe, seguridad en la esperanza y constancia en el amor.

Queremos que en todos los instantes de nuestra vida sintamos que tu eres nuestra Madre.

Por Jesucristo nuestro Señor.

Amén.

Oraciones a la Virgen de Schönstatt

Oraciones a la Virgen de Schönstatt

 

Querida Madre y Reina: Vengo a tu Santuario a buscar el silencio que afuera en el mundo lleno de ruidos , no es facil encontrar.

En mi ambiente muchas veces se vive la intranquilidad y en mi familia no siempre se vive la alegría, por eso a veces la vida se me hace dificil.

Hoy junto a Ti, quiero encontrar la paz; quisiera silenciar mi corazón ya que muchas veces no puedo rezar porque mi alma no puede descansar en Ti.

ORACION A NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE

ORACION A NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE

 
ORACIONES DE ACCIÓN DE GRACIAS

Nosotros le damos gracias, Estimada Señora
Por los 500 años de Cristiandad en las Américas, que siguen al descubrimiento de nuestro continente por Cristobal Colón.
Por las apariciones de Nuestra Señora de Guadalupe y por Su protección.
Por las bendiciones dadas a las Américas por el Corazón Inmaculado de Maria.

LAS PETICIONES GENERALES

Oración a Nuestra Señora de Lourdes 2

Oración a Nuestra Señora de Lourdes

Dóciles a la invitación de tu voz maternal, oh Virgen Inmaculada de Lourdes, acudimos a tus pies en la humilde gruta donde aparecisteis para indicar a los extraviados el camino de la oración y penitencia, dispensando a los que sufren las gracias y prodigios de tu soberana bondad.
Recibid, oh reina compasiva, las alabanzas y súplicas que pueblos y naciones, unidos en la angustia y la amargura, elevan confiados a Ti.

Oración a Nuestra Señora de Lourdes 1

Oración a Nuestra Señora de Lourdes

Oh María, que te apareciste a Bernardita
en la cavidad de la roca;
al frío y a las sombras del invierno
tú les trajiste el calor de tu presencia
y el resplandor de tu belleza.

Infunde la esperanza, renueva la confianza
en el vacío de nuestras vidas,
tantas veces sumidas en la sombra,
y en el vacío de nuestro mundo,
en el que el Mal hace valer su fuerza.

Tú, que eres la Inmaculada Concepción,
socórrenos, pues somos pecadores.