Señor, quiero ser como un niño.
Señor, quiero ser como un niño.
Señor:
Lo que me pides ahora es que sea dócil al Espíritu Santo.
Así cada vez me pareceré más a Ti y, por tanto,
seré mejor hijo de Dios.
Ayúdame, Jesús,
a tener la docilidad de un niño pequeño,
que sólo busca hacer la voluntad de su padre,
darle alegrías, y pedirle lo que necesita
con la confianza de que su padre también le quiere
y desea lo mejor para él.
Ayúdame también a nacer de nuevo una y otra vez.
Amen