Quiero que mi Navidad
no se me escape una vez más,
escuchar al mundo entero,
cambiar mis ojos cansados ya de juzgar.
He intentado ser feliz,
alejarme siempre de tu calor.
He negado mi amistad
al querer llenar de oro mi corazón.
NO DURMAIS QUE UN NIÑO VENDRA.
VENDRA EL SEÑOR. ES NUESTRO DIOS.
NO DURMAIS QUE UN NIÑO VENDRA.
VENDRA EL SEÑOR. ES NUESTRO DIOS.
Tu me has ofrecido en ti
un descanso de verdad.
Y, quizá, no he sabido encontrar
un tiempo vivo para escuchar.
Siempre quise tu perdón
y a mi hermano yo no perdoné.
Insensible y sin amor
ante el odio, la injusticia y el dolor.
Quiero sentirte a tí,
Señor Jesús,en mi vivir.
Y amar con una sonrisa
al hombre que sufre por falta de amor.
Abrazar al niño enfermo,
dar la mano al joven que se perdió.
Ofrecer todo mi ser,
y ser pobre entre los pobres como Tú.